Esta historia se trata de un hombre divorciado que recibe una horrible noticia: sufre un cáncer voraz que lo dejará con vida uno o dos años. Para tratar de entender su
destino, asiste a una clase sobre la muerte donde casualmente conoce a Phoenix (Peet), una mujer que resulta trabajar como asistente de decana. La química entre ambos nace al instante en que cruzan palabras y pronto nace una relación que, para el conocimiento de ambos, tiene una fecha de término cercana que ninguno de los dos puede evitar. La película muestra que todo en esta vida depende del punto de vista que le demos. Una lección de vida que muestra la importancia de la alegría de vivir y de cómo el humor es un gran aliado en situaciones complicadas. Amistad, alegría, optimismo y actitud son algunas de las palabras con las que podría definir este brillante “film”.
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